¿No está seguro de qué tipo de bancarrota es mejor para su negocio o empresa pequeña? Aprenda más acerca de las ventajas y desventajas de la bancarrota de los Capítulos 7 y 13.
La mayoría de propietarios de negocios pequeños pueden beneficiarse de una declaración de bancarrota. Sin embargo, sus opciones dependerán de cuestiones como la estructura de su negocio, cuánto dinero debe, los bienes que tiene, y si tiene la intención de que su negocio siga funcionando. Continúe leyendo para conocer las ventajas y desventajas de la bancarrota de los capítulos 7 y 13 para pequeños negocios y cuándo puede usar cada una.
¿Quién puede aplicar a la quiebra del Capítulo 7?
Ambos, individuos y negocios puede aplicar a una quiebra del Capítulo 7. Los propietarios de negocios pequeños tienen la opción de aplicar a este mediante sus negocios o para ellos mismos. Sin embargo, si usted es un propietario único, tanto las deudas de su negocio como sus deudas personales serán resueltas en el mismo caso de quiebra del Capítulo 7.
Cabe mencionar que aplicar a una bancarrota del Capítulo 7 mediante su negocio no extingue ninguna deuda. Muchos dueños de negocios por lo tanto, eligen aplicar solo para una quiebra individual, pues de este modo se exime la responsabilidad del individuo para pagar las deudas del negocio.
Beneficios del Capítulo 7 para los propietarios de pequeños negocios.
Si usted es propietario único, el Capítulo 7 le permite extinguir sus deudas personales y de sus negocios en un solo caso de quiebra. Si las deudas de su negocio exceden a sus deudas personales, usted no tiene que cumplir con el requisito de ingresos del Capítulo 7.
Asimismo, usted puede usar las exenciones de bancarrota para proteger sus bienes personales y los de su negocio. De esta manera, y en algunos casos, usted podría continuar operando el negocio tras liquidar las deudas de su negocio en quiebra. Sin embargo, si no pudiera llegar a proteger todos los bienes que su pequeña empresa necesita para seguir operando, el fideicomisario del Capítulo 7 venderá los bienes y propiedades no exentos, lo cual podría arruinar su negocio.
Si éste es una corporación, o una empresa de responsabilidad limitada (LLC), el Capítulo 7 de bancarrota le provee los medios para cerrar y liquidar su empresa de manera transparente. Cuando aplica al Capítulo 7 en nombre de sus negocios, es responsabilidad del fideicomisario vender los activos del negocio para pagar a sus acreedores. Esto le deja a usted en libertad para hacer otras cosas o buscar trabajo si así lo elige.
Tenga en cuenta que el Capítulo 7 es raramente una buena idea para las sociedades ya que existe la posibilidad de que el fideicomisario llegue a intentar liquidar la deuda vendiendo los bienes personales de los socios.
Inconvenientes del Capítulo 7 para las pequeñas empresas o negocios.
A menos que sea un propietario único presentando este capítulo, su negocio no gozará de la liquidación automática de deudas en el Capítulo 7. Por lo tanto, si usted se considera de alguna manera responsable de las deudas de su negocio, su deuda no dejará de existir a menos de que presente una solicitud personal del Capítulo 7.
Asimismo, usted no puede presentar exenciones para proteger los bienes del negocio en este capítulo. Como resultado, el fideicomisario venderá todas los bienes de su negocio para pagar sus deudas y su negocios cerrará.
Adicionalmente, declarar un negocio en quiebra abre la puerta para que los acreedores presenten objeciones o reclamen que algunas formalidades corporativas no fueron respetadas, y pidan que los dueños o accionistas del negocio paguen las deudas con sus bienes personales.
¿Quién puede aplicar para la quiebra del capítulo 13?
Solo las personas físicas pueden aplicar al Capítulo 13. Los negocios como asociaciones, corporaciones o sociedades de responsabilidad limitada no pueden hacerlo. Sin embargo, de manera similar al Capítulo 7, si usted es un propietario único, puede aplicar personalmente a este para reestructurar sus deudas personales y las de su negocio.
Ventajas del Capítulo 13 para los propietarios de pequeños negocios.
El Capítulo 13 establece que usted puede mantener todos sus bienes y se le da la facilidad de pagar todas o una porción de sus deudas a través del plan de pago. Si usted es un propietario único con una cantidad considerable de bienes en su negocio, un fideicomisario del Capítulo 7 podría venderlos si no cuenta con suficientes exenciones para protegerlos. Sin embargo, a través del Capítulo 13, usted puede proteger todos los bienes de su negocio y mantenerlo funcionando mientras reorganiza sus deudas y el pago de estas. Tenga en mente, sin embargo, que usted debe pagar el valor de los bienes no exentos a través de un plan de pago.
Incluso si su negocio es una asociación, corporación o sociedad de responsabilidad limitada (LLC), usted puede reorganizar e incluso eliminar su responsabilidad personal en las deudas del negocio mediante el Capítulo 13. Además el Capítulo 13 le ofrece opciones que el Capítulo 7 no, por ejemplo:
- Ponerse al día con los pagos de su casa, carro o equipo de trabajo.
- Liquidar en orden de prioridad sus deudas, por ejemplo, comenzar con las deudas fiscales y pensiones alimenticias.
- Reducir algunos préstamos al valor de propiedad (cram down)
Desventajas del Capítulo 13 para los propietarios de pequeños negocios.
La primera y más importante desventaja de éste es que los negocios no pueden presentar un Capítulo 13. Además, los casos del Capítulo 13 tardan mucho más tiempo en resolverse que los del Capítulo 7 debido a que tiene que hacer pagos mensuales a un fideicomisario por entre tres y cinco años.
Si usted no tiene bienes no exentos, puede mantener sus bienes, pero deberá pagar un monto igual a su valor a sus acreedores no asegurados, lo cual pueden aumentar su plan de pagos significativamente.
El Capítulo 13 puede ayudarle con sus deudas personales, así como su parte dentro del negocio, pero éste aún tendrá que enfrentar sus problemas y finiquitar su adeudo.