Demandas por acoso o discriminación

Las demandas por acoso o discriminación tienen sus procedimientos particulares. Por eso, antes de que usted pueda presentar una demanda por acoso o discriminación contra su patrón, tiene que presentar su queja ante una agencia estatal o federal.

Si usted está enfrentando situaciones de acoso o discriminación en el trabajo, es necesario que tome todas las precauciones necesarias para proteger sus derechos. Esto puede ayudarle no sólo a poner fin a los malos tratos, sino también a mejorar su situación laboral. No obstante incluso si los malos tratos no acaban y su situación no mejora demasiado, tomar en cuenta las siguientes recomendaciones pueden ayudarle a probar su caso y conservar su derecho a demandar, en caso  desear hacerlo más tarde ante los tribunales. 

Hable con su agresor.

Aunque le resulte desagradable, lo primero que debe plantearse hacer es confrontar a quién lo trata inapropiadamente. Por muy tensa que resulte la situación, desde una perspectiva práctica esta es la mejor manera de lograr que el comportamiento de su agresor se detenga. Legalmente hablando, darle un aviso al agresor le ayudará a probar algunos puntos importantes si más tarde presenta una demanda.

Por ejemplo, en un caso de acoso, una de las cosas que el empleado aquejado de acoso debe probar, es que el comportamiento de su agresor no era bien recibido. Esto supone, en otras palabras, que la persona agredida debe dejar absolutamente claro que no le gustó, que no participó voluntariamente de éste y que no le resultó en lo absoluto agradable. Tenga esto muy en cuenta, pues hay casos de acoso sexual en los cuales el agresor, una vez demandado, afirma que la víctima siempre se rió con sus bromas, lo cual le hizo pensar que sus comentarios lascivos eran “halagadores”. Por eso, la mejor forma de demostrar su repudio hacia estas conductas  es comprobando que usted le hizo saber a su agresor su desacuerdo y que usted se sintió ofendido por su comportamiento.

Tome en cuenta que si la situación no mejora, debe poner sus preocupaciones por escrito y hacérselas llegar. Mantenga una copia de la queja para usted, a fin de sustentar con ello futuras acciones legales.

Presente una queja dentro de su empresa.

Lo siguiente que debe hacer si conversar no resuelve el problema, o si decidió saltarse el paso anterior porque, por ejemplo, usted temía por su seguridad, es presentar una queja dentro de la empresa en la que labora. Para hacerlo de la forma adecuada, es necesario que consulte en el manual del empleado o que pregunte al departamento de recursos humanos de la empresa, cuál es el procedimiento a seguir y cómo presentar una queja por acoso o discriminación. Siga esas instrucciones al pie de la letra. Es importante que también guarde para sus archivos una copia de esta queja.

Considere muy seriamente realizar este procedimiento, porque al presentar una queja, usted le da a la compañía la oportunidad de investigar y resolver el problema. 

En un caso de acoso, por ejemplo, queda establecido que si la empresa conocía de la situación, puede resultar también responsable ante la ley de no haber atendido la situación oportunamente. Pero esto dependerá de si usted hizo del conocimiento de la empresa las circunstancias y esta tuvo la oportunidad de remediarlo. Si usted está siendo acosado(a) por un gerente y el resultado final fuera una acción laboral tangible en su contra, como un despido, la negación de un ascenso o un descenso de posición, la compañía será responsable (en caso de que la situación fuera de su conocimiento). Sin embargo, si usted está siendo acosado por un compañero de trabajo o por un gerente que no está en posición de tomar este tipo de acciones en su contra, la compañía podría argumentar que desconocían de la situación. Por eso, al presentar una queja interna, usted está protegiéndose también de cualquier posible represalia: su denuncia pone en conocimiento de la empresa el problema y también la responsabiliza de su solución.

Mismo caso en situaciones que involucran discriminación. Si la compañía no toma medidas efectivas para mejorar su situación, usted tendrá entonces argumentos más sólidos para reclamar daños punitivos. Los daños punitivos son aquellos que tienen como fin la intención de castigar a un patrón por comportamientos ofensivos. 

Presente cargos administrativos.

Antes de que usted pueda presentar una demanda por discriminación o acoso ante la Ley Federal, debe presentar un cargo administrativo ante la Comisión Federal de Igualdad de Oportunidades en el Empleo (Equal Employment Opportunity Commission, EEOC), o ante una agencia estatal de similares características. Tenga en cuenta que este es un requisito legal: si usted presenta una demanda sin haber presentado primero un cargo, su demanda puede llegar a ser desestimada por no haber agotado los recursos administrativos legales.

Dentro de los Estados Unidos, muchos estados también requieren que los empleados presenten una queja administrativa ante la agencia estatal de prácticas laborales justas correspondiente, previo a la presentación de una demanda por discriminación o acoso basada en la ley estatal.

Una vez que usted presente esta acusación, la EEOC o la agencia le notificará de ello a su patrón. La agencia podría desestimar su demanda, investigar un poco más, solicitar que usted y su patrón traten de resolver o mediar el asunto o quizás tomar otra acción. A menos que la agencia decida presentar una demanda en su nombre, algo que no ocurre con frecuencia, después de un tiempo la EEOC procesará su reclamo y emitirá una carta indicando que usted tiene derecho a demandar. Una vez que reciba esa carta, usted ya está en condiciones de presentar una demanda.

Los plazos establecidos para presentar un cargo administrativa son cortos. Asimismo, los plazos para demandar después de recibir la carta respuesta de la EEOC, suelen ser limitados. Si aún no es representado por un abogado, este es un buen momento para buscar ayuda legal. En especial porque un abogado le puede ayudar a evaluar la solidez de sus reclamos, a asegurarse de que no pierda ninguna fecha límite, así como a redactar su reclamo administrativa e incluso ayudarle a negociar con su patrón.

Presentando una demanda.

Una vez que reciba la autorización para demandar, usted está en condiciones de presentar una demanda. Si debe hacerlo, dónde, cuándo y qué incluir en ella, son decisiones importantes, para lo cual necesitará la ayuda de un abogado.