Algunos usan los términos asalto y hurto intercambiados, es decir en un lugar del otro y viceversa. Las palabras en realidad son términos diferentes que se refieren a dos distintos delitos, con sus propias definiciones legales y sanciones.
Imagine que una familia regresa a casa después de una noche para encontrar la puerta de entrada entreabierta. Los miembros de la familia entran para descubrir que faltan joyas y otros artículos. Cuando llaman a la policía, ¿qué informan? ¿Un hurto o un asalto?
Mientras que las personas a menudo usan los términos “hurto” y “asalto” indistintamente, las palabras en realidad tienen diferencias significativas. El hurto involucra a una persona que ingresa ilegalmente a un edificio para cometer un delito mientras está dentro. El asalto es generalmente cuando alguien toma algo de valor directamente de otra persona mediante el uso de la fuerza y la intimidación.
Entonces, para responder la pregunta, la casa de la familia ha sido hurtada (burglarized).
Asalto (robbery).
El asalto es un delito en el que alguien toma algo de valor directamente de otra persona. Si bien las leyes varían según el estado, los elementos típicos de este delito son:
- Tomar dinero o propiedad.
- Directamente de alguien.
- Sin permiso.
- Con la intención de mantener la propiedad permanentemente.
- Mediante el uso de la fuerza o la intimidación.
Hurto (burglary).
Los estados suelen definir el hurto de manera ligeramente diferente. Pero el delito generalmente tiene los siguientes elementos:
- Entrar ilegalmente.
- Un edificio (generalmente una casa o negocio).
- Con la intención de robar algo o cometer un delito mientras está dentro.
LEYES ANTIGUAS DE HURTO.
En el pasado, la mayoría de los estados definían el hurto como irrumpir por la fuerza en la casa de otra persona por la noche. Hoy, sin embargo, los estatutos contra hurtos son generalmente mucho más amplios. Normalmente, alguien puede cometer un hurto simplemente entrando a cualquier tipo de edificio sin permiso en cualquier momento del día mientras tenga la intención de cometer un delito una vez dentro.
Robo, fuerza y miedo.
Como puede ver arriba, asalto y hurto tienen elementos distintos. Por ejemplo, uno involucra un edificio o propiedad y el otro no. A continuación, hay otro par de otras diferencias clave.
Robo (theft).
Aunque el hurto (burglary) a menudo implica un robo (theft), una persona no tiene que sustraer o robar nada para ser condenada por el delito. El asalto, por otro lado, casi siempre involucra una sustracción o robo: el acusado toma o intenta tomar algo de la víctima.
Según muchas leyes, el delito previsto debe ser un delito grave o alguna forma de robo, pero algunos estados dicen que una persona que ingresa a un edificio sin permiso y tiene la intención de cometer un delito en el interior es culpable de hurto. Por ejemplo, ingresar ilegalmente a un edificio con la intención de cometer un asalto puede ser la base de una condena por hurto.
Fuerza o miedo.
El hurto y el asalto también difieren cuando se trata del uso de la fuerza. La fuerza, ya sea contra una persona o para ingresar a un edificio, generalmente no se requiere en una condena por hurto. Sin embargo, un asalto implica necesariamente el uso de la fuerza, o al menos la intimidación, contra otra persona.
Para ser condenado por asalto, alguien debe usar la violencia o la amenaza de violencia para tomar algo de valor directamente de otro. Por ejemplo, supongamos que un hombre armado con un cuchillo exige dinero a un empleado de una tienda y luego huye con el efectivo. El hombre acaba de cometer un asalto porque utilizó la amenaza de la fuerza para robar dinero directamente de la víctima.
Sanciones potenciales.
Al igual que con las definiciones de asalto y hurto, las sanciones varían según el estado. Sin embargo, en general, ambos se consideran delitos graves y las condenas pueden dar lugar a castigos severos. La mayoría de los estados dividen los delitos de asalto y hurto en grados de severidad, dependiendo de factores como si un arma está involucrada o si alguien resulta herido.
Sanciones por asalto.
En la mayoría de los estados, el asalto es siempre un delito grave. Una condena por asalto puede resultar en un tiempo de prisión significativo y fuertes multas, especialmente si el crimen involucra un arma. Por ejemplo, la ley de Maine establece que el asalto se castiga con un máximo de diez años en prisión y una multa de hasta $ 20,000 dólares. Una condena por asalto a mano armada en ese estado se clasifica como un delito todavía más grave y puede conducir a una sentencia de hasta 30 años de prisión y una multa de hasta $ 50,000 dólares. (Me. Rev. Stat. Tit. 17-A, §§ 651, 1252, 1301 (2017).)
Sanciones por hurto.
Al igual que con el asalto, en la mayoría de los casos, el hurto es un delito grave. Las leyes estatales tienden a dividir el hurto en diferentes niveles de gravedad, dependiendo de factores como:
- El tipo de delito que el ladrón pretendía cometer dentro del edificio.
- Si el ladrón estaba armado con un arma
- El tipo de edificio involucrado, y
- Si el edificio o la propiedad estaba ocupado en ese momento.
En Hawaii, por ejemplo, si un ladrón que está armado con un arma daña a alguien durante el crimen o ingresa a una residencia (a diferencia de una oficina, por ejemplo) puede ser sentenciado a hasta diez años de prisión y multado con hasta $ 25,000 dólares. (Haw. Rev. Stat. Ann. §§ 706-640, 706-660, 708-810 (2017).)
Obtenga ayuda legal.
Una vez más, los estatutos penales y las sanciones pueden variar ampliamente según el estado. Para obtener más información sobre hurto y asalto, y para conocer las leyes en su área, consulte a un abogado con experiencia en defensa penal.